FORMATEAR MEDIOS EXTRAÍBLES (USB, TARJETAS SD, ETC.)
En primer lugar, debes conocer los formatos de archivo, ya que dependiendo de la plataforma es el que
debes elegir. Éstos son los más comunes:
-NTFS: New Technology File System, es el sistema de archivos que utilizan las versiones modernas de
Windows.
-HFS+: Herachical File System o Sistema Jerárquico de Archivos, es utilizado por las versiones modernas
de macOS.
-FAT32: File Allocation Table 32 o Tabla de Asignación de Archivos, era el estándar de Windows antes
del NTFS.
-exFAT: extended File Allocation Table o Tabla extendida de Asignación de Archivos, está basada en
FAT32 y se utiliza cuando NTFS no es factible debido a la sobrecarga de las estructuras de datos.
-EXT 2, 3 y 4: Extended File System o Sistema Extendido de Archivos, fue el primer sistema de archivos
creado especialmente para Linux.
Tamaño de archivos
A excepción de FAT32, el cual sólo puede guardar archivos de hasta 4GB, todos los formatos soportan
prácticamente cualquier tamaño de archivo. EXT 2 y 3 soportan archivos de 16GB, pero en algunos sistemas
pueden ser de hasta 2TB; mientras que EXT 4 soporta archivos de hasta 1EB.
¿Qué formato es el mejor?
Eso depende del sistema que usas. Si eres Usuario de Windows es recomendable que formatees tu drive
a NTFS, pero si eres Usuario de Mac es preferible que uses HFS+. Ahora, si usas las dos plataformas te
recomendamos que el formato de tu memoria USB sea 'exFAT' para que no tengas problemas al momento
de pasar tus archivos.
Pasos para formatear una memoria USB en Windows
NOTA: Antes de formatear tu memoria USB, haz un respaldo de los archivos que quieras conservar.
Paso 1.- Inserta tu USB y abre el Explorador de Archivos. Ubica tu dispositivo, haz clic derecho y selecciona
“Formatear”
Paso 2.- Elige el formato que quieras y haz clic en “Iniciar”. Listo, haz formateado exitosamente tu memoria
USB.4
FORMATEO DEL DISCO DURO
Formateo desde el explorador de archivos
Esta es una de las formas más conocidas, y una de las más sencillas. Es tan fácil como abrir el explorador
de archivos, ir a la unidad que nos interesa y hacer clic con el botón derecho encima de ella. En el menú que
aparecerá, seleccionamos "Formatear".
Basta con que comprobemos que todo está en orden (podremos modificar un par de opciones, entre ellas el sistema de archivos en el que se formateará la unidad) y pulsamos en Iniciar. A partir de aquí, el sistema se encargará de todo.
Ahora seleccionamos el disco que queremos formatear y hacemos clic con el botón derecho encima de él. Seleccionamos la opción "Formatear".
Seleccionamos el sistema de archivos (el tamaño de la unidad de asignación lo dejamos como "Predeterminado") y hacemos clic en "Aceptar". A partir de aquí, el sistema operativo se encargará del resto.
Basta con que comprobemos que todo está en orden (podremos modificar un par de opciones, entre ellas el sistema de archivos en el que se formateará la unidad) y pulsamos en Iniciar. A partir de aquí, el sistema se encargará de todo.
Ahora seleccionamos el disco que queremos formatear y hacemos clic con el botón derecho encima de él. Seleccionamos la opción "Formatear".
Seleccionamos el sistema de archivos (el tamaño de la unidad de asignación lo dejamos como "Predeterminado") y hacemos clic en "Aceptar". A partir de aquí, el sistema operativo se encargará del resto.
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